Mácher se encuentra al oeste de la capitalidad del municipio, y su caserío se encuentra disperso a ambos lados de la carretera que va a Yaiza, subsistiendo aún viejos caserones del siglo pasado.
Sus habitantes se han dedicado tradicionalmente al cultivo del tomate y cebolla, existiendo una curiosa división agraria. En los terrenos situados al norte de la carretera es donde se cultiva la cebolla, mientras que en los que se hallan al sur, de la misma, se dedica al tomate.
Hay que señalar que la actividad agrícola en este lugar apenas existe, ocupándose sus moradores en la actividad turística y servicios.
Al final de Junio, en la ladera de la Montaña de Guardilama y la Montañeta, hasta la mismísima orilla del mar, el pueblo de Mácher, se viste de gala para festejar a su patrón, SAN PEDRO. Se caracterizan estas fiestas por la sencillez de sus actos y el mantenimiento de sus tradiciones. Una fiesta en la que podrá saborear y disfrutar desde una partida al envite y bola, y el colorido de los grupos folclóricos, hasta un buen vino y la rica mistela de limón que su gente elabora con bastante sabiduría para repartirla el día del asadero de “jareas”.